jueves, febrero 21, 2008

Un mundo mejor, por puro egoísmo


Cuando una habla de altruismo la tachan de ingenua e idealista, así que he pensado que tal vez sea más práctico argumentar porqué un mundo mejor no sólo es posible sino que es beneficioso para todas las personas, no sólo para las minorías que parecen las beneficiarias directas. A ver si convenzo a alguien y me ayudáis a completar la entrada:

- En un mundo sin machismo, los hombres no se verían limitados por unos roles impuestos que no van con ellos. No sentirían la necesidad constante de demostrar su fuerza y su virilidad, dar siempre la talla, defender su honor y el de su familia, disfrutarían de relaciones más libres. Redescubrirían lo maravilloso de cuidar a otras personas, expresar y compartir sentimientos con ellas. No padecerían tasas más altas de accidentes de tráfico, condenas de cárcel, drogadicción, suicidios... Vivirían en países más ricos, puesto que la igualdad es un fuerte motor de desarrollo, e imaginemos lo que pueden cundir esas capacidades de la mitad de la población que permanecen invisibles.

- En un mundo sin homofobia, mujeres y hombres heterosexuales darían rienda suelta a unas relaciones sexuales, afectivas y de amistad más plenas. Desaparecería el miedo a parecer maricón o bollera, las distancias de personas valiosas, la represión de fantasías y prácticas deseadas.

- En un mundo sin racismo, la población blanca ampliaría el abanico de personas con las que enriquecerse, y la cantidad de mundos y culturas a los que trasladarse sin apenas moverse de casa. Transmitiendo confianza en vez de miedo, recibiría un trato basado también en la confianza. Las personas libres de odio, fruto de miedos irracionales, se sienten más seguras y felices.

- En un mundo sin xenofobia, la sociedad autóctona sabría apreciar el papel que los inmigrantes están teniendo: elevando la tasa de natalidad, cuidando a nuestros ancianos y criaturas, haciendo posible la emancipación de muchas mujeres occidentales... El siguiente paso para superar esa fase utilitarista en la que nos encontramos sería dejar de sentirnos amenazados para unir fuerzas. Porque los problemas que vivimos no son de raza sino de clase, de una distribución injusta de la riqueza que perjudica al pueblo, venga de Móstoles o de Barranquilla.

- En un mundo más accesible, las personas sin discapacidades tendrían la tranquilidad de que si se quedan embarazadas, se rompen una pierna o tienen una enfermedad, su ciudad estará preparada para que se muevan con comodidad.

- En un mundo en paz, los países que aparentemente no estamos en guerra podríamos dedicar nuestro desorbitado presupuesto militar a nuestro propio desarrollo y bienestar. No nos podrían manipular sembrando miedo a potencias emergentes, cruzadas, terroristas internacionales... Los dirigentes perderían excusas para legitimar la represión y la tortura.

- En un mundo más verde, qué duda cabe de que todas las personas ganaríamos en salud. Dado que el cambio climático es inevitable, ¿porqué no organizarnos desde ahora para evitar una crisis y, más aún, convertir la amenaza en una oportunidad para consumir de una manera más racional y satisfactoria, y transformar el modelo económico en un sistema más agradable e innovador?

- En un mundo más diverso, aquellos que se limitan con el adjetivo "normal" podrían dar suelta a su personalidad e individualidad. Sentirían que se muestren como se muestren serán respetados y apreciados, y que pase lo que les pase nadie les juzgará.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues vamos a estar de acuerdo, aunque el subconsciente te delate y en la entrada sólo parezcan beneficiados los blancos en un mundo sin racismo :p

Itsaso dijo...

Sin duda, buenas las ideas. Pero, soñar es libre no? A día de hoy poder conseguir todo lo que mencionas me parece más bien un sueño.

La imagen me recuerda a los anuncios de compresas que decian eso de, "¿a que huelen las nubes?".

Buen fin de semana...

Redeyes dijo...

Me gusta tu perfil del mundo. Yo quizás añadiría un mundo más culto. Entendiendo por cultura todo lo relacionado con la relación del ser humano con su entorno y la creativida. Y también un mundo más laico y no, por ello, menos espiritual. Bicos

Anónimo dijo...

Todos estamos de acuerdo en ello, pero resulta tan complicado llegar a un mundo así.

besos

Azalea dijo...

Logico Txus que hable de los beneficios para la poblacion blanca, porque la entrada esta creada desde esa perspectiva y porque los beneficios para los inmigrantes son bastante obvios. El problema es que la gente creo que todas estas cosas no nos afectan, pero la vioencia, racismo... afecta muchisimo al nivel economico de un pais, a la saturacion de la sanidad, a la dedicacion de impuestos a temas a los que no se tendrian que dedicar porque no existienran. El maltrato es cosa de todos, es un problema de todos.

June Fernández dijo...

Txus: Qué capullo (con cariño), siempre sacándome las cosquillas. Tienes razón, pero es que escribo desde mí, y es esa la forma de discriminación que yo conozco, y a veces hasta practico, aunque lo intente combatir.

Itsaso y Fernando: Me habéis puesto un poco triste (sobre todo por el tono irónico de Itsaso), pero lo he superado. Lo he superado porque me creo lo que digo, y no sólo lo digo sino que intento llevarlo a la práctica cada día. Fernando, por supuesto que es complicado, pero quiero pensar que es posible.

Itsaso, no se trata de oler nubes. Las utopías son metas inalcanzables. Lo que planteo no es inalcanzable puesto que millones de personas en todo el mundo viven de acuerdo con esos principios. No son grandes revoluciones, sino pequeños pasos lo que cambian el mundo. Y quienes no los dan, estoy convencida que en su mayoría es porque no conocen las ventajas de las que hablo, y sí las inercias que les han impuesto. Lee "Nadie es neutral en un tren en marcha", de Howard Zinn, por ejemplo si, como parece, no crees en el poder de transformación del mundo que tenemos las personas. La historia ofrece miles de pruebas.

Isaac: Gracias por tu necesaria aportación. La creatividad y la espiritualidad son imprescindibles para lograr esos mundos deseables. Y la libertad para dar rienda suelta a las anteriores. La laicidad para ser libre. Hay que ver, todo está conectado.

Azalea: No entiendo tu comentario, ya me puedes perdonar. Claro que sería deseable un mundo sin inmigración obligada, sin las desigualdad que llevan a emigrar a la mayoría (otras lo hacen por cuestiones afectivas, desarrollo de nuevos proyectos...) Pero si me estás diciendo que la inmigración satura la sanidad y obliga a dedicar impuestos a cosas poco prioritarias, esas afirmaciones son falsas y además ofensivas en un blog en el que la autora y varios de los comentaristas dedican gran parte de su energía a combatir la xenofobia y defender los derechos de todas las personas, sea cual sea su nacionalidad. Espero haberte malinterpretado.

Itsaso dijo...

No pretendía ser ironica. Tan solo creo que me parece dificil conseguirlo, aún sabiendo que haciendo se cambian las cosas y sin hacer nada seguiremos igual. Se que hay mucha gente trabaja por cambiar las cosas y que con pasos unidos algún día se conseguirá algo.

Lo de las nubes lo decía por la foto.

Sheila dijo...

Bueno, yo discrepo.
Creo que si el mundo cambiará com tu dices, en realidad no podrías predecir las cosas buenas y malas que habría. No sabrías si realmente todos saldrían favorecidos, probablemente no.
Si el mundo que dices que sería el mejor para todos, fuera realmente tan bueno para todos, seguramente ya sería vigente. Cuando se mantienen unas estructuras no es porque la gente sea estupida y masoquista, sinó porque va bien para alguien.
Por eso, todo cambio implica violencia, porque siempre sale alguien desfavorecido.

Bueno, quizás sea demasiado pragmática, pero prefiero partir de lo que es de lo que debería ser. Porque si en algunos casos lo que debería ser me gusta, otros muchos me disgusta enormemente.

Masculino Plural dijo...

NI ERES EXGERADA, NI DEMASIADO PRAGMÁTICA...SIMPLEMENTE REALISTA. NOSOTROS ABOGAMOS POR UN MUNDO SIMILAR AL QUE DESCRIBES EN TU ESCRITO. ¿CUESTA TANTO CONSEGUIRLO, JODER?

¿CUESTA TANTO RESPETAR A LAS PESONAS QUE TIENES ALREDEDOR O A TU PROPIO MEDIO AMBIENTE? PARA NOSOTROS ES COMO LAVARNOS LOS DIENTES CADA DÍA: UNA TAREA DIARIA. TAL VEZ SEA UN PROBLEMA EDUCACIONAL DESDE LA INFANCIA...

MUSHOH´ BESO DEHDE SEVILLA

JM JC

June Fernández dijo...

Siento haberte malinterpretado, Itsaso. Sheila, el sistema beneficia a cuatro, y en cambio son millones los que lo hacen posible. No creo que no sea cuestión de masoquismo o ignorancia, sino de no haberse planteado ciertas cosas, y que la presión para no hacerlo es enorme.

Me ha gustado, masculinos, la comparación. La mejor actitud de cambio, la más exitosa, es la naturalidad. Si nos dejáramos llevar, si fuéramos libres, ese mundo surgiría de una manera fluída e inevitable.