sábado, noviembre 08, 2008

Post inevitable

Llevo toda la semana resistiéndome a escribir esta entrada. Pero ayer el AS me convenció de que es inevitable: Obama aparece incluso en primera plana de este periódico deportivo. El anodino hecho noticiable es que jugó a baloncesto de joven. ¿Qué digo yo sobre Obama? Prefiero que habléis por mí, ya que mi opinión es una especie de mezcla de vuestras entradas:

- La otra agenda, Lápices para la paz y Entrenómadas se despiden con alegría de Bush
- Migramundo nos emplaza a asumir un cambio personal, en vez de delegar en un mesías
- Tico hace tiempo que dejó de creer en que se pueda cambiar el mundo votando
- Rancho Latino muestra a una América Latina ilusionada, pero alerta de que tanta expectativa chocará con la cruda realidad
- Algarabía pide que el show se acabe ya

Además, en los comentarios de vuestras entradas he encontrado datos cruciales:

- Algarabía nos cuenta que Obama ha elegido como jefe de su gabinete a "un sionista que sirvió en el ejército israelí, e hijo de un colaborador de la banda terrorista Irgun: Rahm Emanuel. El susodicho votó a favor de la invasión de Iraq".
- Félix Soria nos recomienda en Rancho Latino echar un vistazo a la lista de los principales contribuyentes a la campaña de Obama.

En prensa, entre tanto exceso, me quedo con el artículo que publica hoy Carlos Boyero. En resumen, admite que Obama no cambiará el mundo, pero reivindica su "derecho a un subidón si gana ese político negro que parece otra cosa".

Mi lado combativo se niega a ilusionarse con un nuevo presidente de un imperio que seguirá haciendo lo que hacen los imperios: alimentar un sistema mundial profundamente injusto, apoyar a gobiernos genocidas como el israelí, obstaculizar los procesos de empoderamiento (el concepto feminista me parece aplicable) de América Latina... Mi lado combativo tampoco olvida que el gobierno de ZP, que suscitó una ilusión similar a pequeña escala, mantiene -o incluso desarrolla - una peligrosamente sutil política de inmigración, xenófoba y contraria a los derechos humanos, por poner un ejemplo.

Pero mi lado pragmático es consciente de que cualquier pequeño cambio en el gobierno más poderoso del mundo podría transformar la vida de millones de personas. La gente tiene derecho a ilusionarse ante mejoras ínfimas a nivel global que den un vuelco a sus vidas. Mi lado romántico se dejó encandilar por un discurso que elogiaba a las heroínas invisibles y que hablaba de la doble discriminación de ser mujer y negra, frente a un Mc Cain para el que el mayor héroe es él mismo, y aportaba como prueba sus cicatrices de guerra.

Conclusión: pasado el subidón legítimo, pongámonos las pilas para ser más críticas que nunca. Los presidentes burdos como Aznar y Bush movilizan más que las prácticas sibilinas que esconde el llamado "talante". Y, sobre todo, por favor: no frivolicemos diciendo que con Obama se ha superado el racismo. (Esa afirmación ha sido incluso titular de El País) ¿Alguien con un mínimo de cerebro osaría decir que en Alemania, Chile o Argentina no hay machismo porque estén gobernados por mujeres? ¿El matrimonio gay ha erradicado la homofobia? Felicitemos a la población afroamericana y, en especial, a las activistas que tanto lucharon por el reconocimiento de sus derechos civiles. Reconozcamos que es un hito de un gran contenido simbólico que la cara visible del país más poderoso del mundo sea negra. Pero respecto a cualquier discriminación, pocas cosas hay más peligrosas que el espejismo de la igualdad. Queda mucho por hacer. Mucho.

5 comentarios:

NáN dijo...

Como siempre, queda casi todo por hacer. Y lo tenemos que ir haciendo nosotros.

El Sistema es el que es (no ha habido nunca en el mundo un sistema que no haya trabajado exclusivamente para mantenerse).

Pero ya podemos decir en voz alta algo: el comunismo fracasó, pero el capitalismo ha fracasado, hasta las mujeres de la limpieza de mi empresa que votan al PP porque no se puede consentir que Zapatero suelte a De Juana, me lo reconocen ya (las pongo siempre de ejemplo de sostén popular del capitalismo, dado que tienen los sueldos más vergonzosos de la empresa).

Pero dicho todo lo anterior, nunca nada es igual a nada: no vamos a estar más abrigados que antes, pero estaremos menos desabrigados.

Espero que esta última frase se entienda.

Anónimo dijo...

Muy bueno y trabajado tu post.
Soy de los que se cansan pronto de tanto bombardeo y de los que se ríen mucho de tanta simpleza. Pero hay cosas que política y sociológicamente me interesan del "fenómeno Obama". Como dice Boyero, la consciencia de la importancia que tienen los cambios en el gobierno más poderoso del mundo nos da una idea de lo mucho que se espera de ellos, síntoma sobre todo del hartazgo y la inquina que despertaban los otros.
Saludos.

JLuis dijo...

June... yo no dejo de alucinar con los titulares que leo y la ilusión que genera Obama.

Entiendo que la mezcla de su "esperanzador" discurso y el contraste con Bush implican una mayor expectación, pero ....

... pero no se cuando acaba la ilusión y cuando empieza el show mediático.

Un abrzote

FERNANDO SANCHEZ POSTIGO dijo...

El tiempo dirá si Obama lleva a cabo sus ideas o sólo se queda en eso, en ideas. Un beso.

chus dijo...

Yo creo que Obama es la excusa para celebrar que Mckean y Sarah Palin no van a mover el cotarro.